Para el año 2050, el Valle del Cauca será un departamento carbono neutral, pionero en mercados de carbono, vanguardista en procesos de producción más limpios dentro de los sectores manufacturero, energético, de producción de proteína blanca y de caña de azúcar. Su matriz energética será confiable, complementaria y estará basada principalmente en energías renovables como la solar, la biomasa y el biogás. Además, la demanda de energía del departamento disminuirá con la implementación de acciones de eficiencia energética en el sector de la
construcción y de la industria.

Asimismo, el Valle del Cauca se consolidará como una región innovadora al generar proyectos de cogeneración y autogeneración. En el sector de transporte, el Valle del Cauca transformará su sistema de transporte público a uno interconectado y multimodal logrando la disminución de sus emisiones de GEI en alianza con el sector privado, para incentivar la conversión de las flotas empresariales e institucionales a vehículos híbridos y eléctricos de batería y la estandarización de combustibles para sus vehículos urbanos e interurbanos en cuya transición
empleará gas natural vehicular.

Todo ello generará cobeneficios tales como economía en el consumo de energía, mejora en la calidad del aire, disminución del ruido, mejor  accesibilidad al transporte público, fomento a la movilidad activa, reducción de enfermedades respiratorias, mayor productividad y competitividad empresarial, fomento a la innovación tecnológica, empoderamiento de las minorías y consecuentemente, una vida con mayor calidad y dignidad para la población.

La visión se logrará en alianza con los sectores público y privado y la sociedad civil y generará una gobernanza territorial integral para garantizar el bienestar general de los vallecaucanos.